“Buscamos dar el paso inicial hacia la soberanía alimentaria en nuestra provincia”, expresó Senn.
La diputada provincial, Jimena Senn, presentó un proyecto para la creación, mantenimiento y explotación de huertos en las áreas urbanas y periurbanas de la provincia de Santa Fe, con el objetivo de generar herramientas, acompañar iniciativas, promover la alimentación adecuada y garantizar el acceso irrestricto a alimentos de gran valor nutricional.
“Buscamos dar el paso inicial hacia la soberanía alimentaria en nuestra provincia” expresó Senn y agregó que “las huertas, como sistemas productivos tradicionales, representan uno de los espacios más importantes en la transmisión y generación de conocimientos, y en el acceso inmediato a numerosas fuentes de nutrientes, permitiendo una alimentación variada, accesible y de calidad”.
En Argentina el 41,1 por ciento de los niños y adolescentes de entre 5 y 17 años presenta exceso de peso, mientras que esta problemática afecta al 67,9 por ciento de las personas mayores de 18 años, según los resultados de la Segunda Encuesta Nacional de Nutrición y Salud, realizada en septiembre de 2019.
“La malnutrición constituye el mayor problema de salud de nuestro país, focalizada en el sobrepeso y la obesidad, y genera un déficit en el desarrollo del capital humano. Es un problema que se está acelerando debido al desigual acceso a los alimentos y el exceso de productos hipercalóricos y procesados, por lo tanto, la situación requiere acciones inmediatas de los gobiernos, la sociedad civil, los organismos internacionales y la industria”, agregó Senn.
En ese sentido, la diputada destacó que “las huertas son una invitación a vivir de un modo más sustentable en la ciudad, además de ser un espacio de integración, interacción y educación para los grupos involucrados”.
CARACTERÍSTICAS DEL PROYECTO
El Programa Provincial de Huertas Urbanas estará destinado al cultivo y producción de alimentos y hierbas medicinales, aromáticas u ornamentales, de forma ecológica y sustentable, manteniendo o mejorando los servicios eco-sistémicos existentes, y destinada al autoabastecimiento y a la venta de los excedentes.
Entre los lineamientos más importantes del programa se destaca que:
La iniciativa se desarrollará en huertas urbanas de gestión pública o en huertas urbanas de gestión privada o por parte del tercer sector.
Podrán ser beneficiarios del mismo personas físicas y jurídicas, cooperativas de trabajo y organizaciones sin fines de lucro, debiendo justificar el carácter social o comunitario de su emprendimiento agrícola, y, en el caso de las personas humanas y de las familias, no contar al momento de la inscripción con ingresos netos que superen la Canasta Básica Total (CBT), medida por el Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Deberá garantizarse que al menos un cincuenta por ciento de los subsidios sean asignados a mujeres, cooperativas integradas mayoritariamente por mujeres, organizaciones sin fines de lucro que trabajen por la diversidad y la igualdad de género, o familias lideradas por mujeres. Se deberá priorizar a los interesados que acrediten un Certificado Único de Discapacidad (CUD) expedido por autoridad competente.
Las técnicas utilizadas para la producción deberán ser de naturaleza agroecológica. No podrán utilizarse fertilizantes químicos, herbicidas o fungicidas, con excepción de aquellos que sean de origen natural. También se deberán promover las buenas prácticas agrícolas (BPA).
El Poder Ejecutivo deberá afectar al programa superficies dentro de las zonas urbanas y periurbanas, ubicadas en tierras de propiedad del Estado Provincial.