El vicegobernador opina sobre el difícil presente y futuro de la UCR local. Y sobre los rumores de un eventual entendimiento del oficialismo con una parte del PJ.
El próximo Congreso, con o sin fallo de la Corte sobre el Fondo del Conurbano, debatirá sobre los recursos para la Nación y las provincias. Sus correligionarios radicales de Cambiemos van a enfrentar un dilema: obedecer al bloque o cuidar los fondos de Santa Fe.
– Pero es ahora que hay que abrir el debate. No después que se renueven las Cámaras… Y los radicales de Cambiemos tienen que debatir, no esconderse más detrás de la grieta. Durante la campaña electoral, debe haber un verdadero debate preelectoral que discuta esos temas. Cómo van a poder defender los intereses de Santa Fe si van a ir a apoyar al gobierno nacional.
Esos temas son muy importantes para la Provincia de Santa Fe. Para nosotros es crucial que los candidatos fijen posiciones sobre cuál va a ser su comportamiento frente a los proyectos oficiales en materia de reforma tributaria, de la distribución de la coparticipación y ante la reforma laboral.
Esos son los debates que hoy brillan por su ausencia. Creo que los candidatos que van por Cambiemos van a tener el síndrome de la obediencia debida al presidente de la Nación, que van a privilegiar lo que quiera la Casa Rosada frente a las aspiraciones provinciales. Van a estar listos para obedecer a los deseos del presidente de la Nación, aunque se perjudique a Santa Fe.
– Algo parecido se dice desde el PJ.
– Además de decirlo hay que hacerlo… Mire, en cuanto a los candidatos del Frente para la Victoria, creo que basta recordar lo que ha ocurrido durante los últimos gobiernos nacionales. Y si antes no defendieron a Santa Fe ¿por qué lo van a hacer ahora…?
Están más interesados en aferrarse a lo que para ellos es su tabla de salvación, que es la figura de Cristina (kirchner) que a cuidar de Santa Fe.
Cuesta mucho hacerle entender a la gente que el proyecto provincial del Frente Progresista, Cívico y Social no tiene compromisos con expresiones políticas nacionales que lo condicionen. Y que son sus candidatos quienes van a ir a defendernos a los santafesinos. El proyecto provincial necesita recursos.
– Hoy hay radicales en tres listas de diputados provinciales: en el Frente por un lado, y por otro hay radicales macrista dentro y fuera de Cambiemos, porque a una de esas expresiones no la dejaron ir a la interna.
– Es realmente una dispersión que asombra… Hay radicales en tantas listas que sólo falta una reforma electoral que diga que hay que llevar a un radical por lista…
– (risas) Una ley de “cupo radical”.
– Es una incongruencia con la historia partidaria. El radicalismo tiene bases ideológicas fundadas, cuenta con una identidad que lo tendría que mantener a salvo de estas contradicciones evidentes con sus principios. Lo bueno es que de ninguna manera está cerrado el diálogo. Los radicales tenemos conversaciones con todos los correligionarios y discutimos, en nuestras convenciones partidarias, y seguimos siendo todos radicales.
– ¿Y hay chances de una reunificación?
– En política no podemos predecir el futuro. Si mañana hay otro alineamiento es probable que podamos reunificarnos.
– En la Cámara de Senadores se pueden llegar a sentir estas divisiones…
– No, definitivamente no. Aquí está muy claro en todos los senadores radicales el convencimiento de honrar el compromiso que se asumió con la ciudadanía desde el Frente Progresista. Y vemos que es esta la única herramienta política para gobernar la provincia, hoy y a futuro.
Vemos con preocupación la dispersión radical que pueda hacer peligrar la próxima gobernación, en 2019. Pero también veo la misma preocupación en los radicales que hoy están en otros proyectos… Eso también nos obliga a tener más diálogo, porque se trata de escribir la historia de la provincia.
Lo que ocurra con la Nación es un tema, pero la provincia es otro. Y nos preocupa mucho más. Faltan dos años.
– ¿Hay letra radical en ese escribir la historia en Santa Fe?
– Creo que sí. Que lo que se hizo y lo que se hace en la provincia de Santa Fe ha cumplido y cumple con lo que nos comprometimos. Y la acción de gobierno del Frente, no sólo lo que decimos, cumple cabalmente con la ideología del radicalismo, con sus principios históricos progresistas, que es muy distinto de lo que ocurre en la Nación… Con el Pro no somos lo mismo, incluso hoy no se cumple ni con lo que se había planteado en la Convención de Gualeguaychú.
Al Frente lo hicimos hace 22 años, pasamos 12 en la oposición y tenemos mucho por hacer.
– La dispersión radical y lo que ha ocurrido en el Frente ha dado lugar a especulaciones sobre una alianza del oficialismo provincial con una parte del PJ.
– Sí, uno lee sobre esas ideas pero la verdad que los radicales no tenemos afinidad con el peronismo. Nos resultaría muy difícil… Somos partidos distintos. Con el socialismo hay una afinidad que es incluso histórica. Pero hasta por razones prácticas sería difícil. Pensemos en lo territorial, en las elecciones locales, ¿cómo hacen los radicales de cada localidad para conformar listas con quienes han disputado elecciones siempre? Sería muy raro terminar aliados con los adversarios.
Sé de esos rumores. Hay que ser muy prudentes y primero debatir algo así internamente muy a fondo. No nos olvidemos que abrir una puerta puede cerrar otras definitivamente para el Frente Progresista…
Quiero destacar que en Santa Fe la relación del Frente con el justicialismo es muy buena, muy madura desde el punto de vista institucional, sobre todo aquí en el Senado. El PJ, manteniendo sus diferencias políticas, con sus críticas, siempre ha dado la gobernabilidad que el Frente ha necesitado durante todos estos años y nos ha permitido sobrellevar situaciones difíciles. Con esa decisión política de la oposición pudimos contar con el marco necesario para desarrollar el gobierno.(Fuente: Luis Rodrigo. Diario El Litoral)